Viernes 26 de Abril 2024
NAZARENA VÉLEZ

Nazarena Vélez tomó una drástica decisión

La palabra de Nazarena Vélez.

Escrito en ENTRETENIMIENTO el

A través de sus redes sociales, Nazarena Vélez anunció que volvió al gimnasio y que lleva un mes de hábitos saludables. Sí, la actriz celebró con sus seguidores de Instagram los primeros 30 días del difícil proceso de comenzar a estar en forma, en donde los resultados no se ven.

Nazarena Vélez compartió una selección de imágenes de su rutina en el gimnasio. “Hoy cumplo 1 mes. Sumando hábitos saludables y haciendo lo que mucho no me gusta, pero me hace bien. Me felicito. No se nota pero se (percibe). ¿Qué haces por vos?”, manifestó orgullosa.

Cabe aclarar que la mamá de Barbie Vélez, quien hoy se desempeña como panelista del programa de “Ángel de Brito”, admitió, en el pasado, que sufrió mucho con su salud debido a que siguió los estándares de belleza impuestos por la sociedad y la televisión.

“Siempre tuve un problema con mi físico: me (repudiaba), me veía gorda, no me gustaba, me veía celulítica. A los 19 años fui mamá y me empezaron a salir estrías. Siempre tuve mambo. Recién me pude reconciliar después del fallecimiento de Fabián.”, manifestó en una entrevista con Infobae.

“Yo siempre fui muy enroscada mentalmente con respecto a mi aspecto físico, pero demasiado al nivel de intoxicarme. No me (dañé) de casualidad, porque Dios no quiso”, aseguró la panelista sobre los procesos de aceptación que afrontó no hace mucho tiempo.

De chiquita era gordita y vivía (maltrato) en el colegio, la pasé mal. Con 14 años empecé a tomar laxantes para estar más flaca, para pertenecer y dejar de ser gorda. Hoy estoy mucho más liberada de eso, no del todo, pero muchísimo más liberada”, destacó.

Consejos

En aquella nota, Nazarena Vélez aconsejó evitar que el peso o el aspecto físico sea un tema de conversación. “Era la típica que te dice apenas entrabas a casa: Qué flaca estás. Lo usaba como si fuera un halago hasta que una amiga me dijo: Estoy más flaca porque tengo cáncer”, recordó.

“Entonces aprendí de una trompada en la cara que no hay que opinar del físico ajeno, ni con buena onda ni con mala onda. Yo trabajé de linda o haciéndome la linda, al menos los últimos años. Gracias a Dios que entré a trabajar en la producción, porque sino sería una angustia”, declaró.