El limón es una de las frutas más utilizadas en recetas, a nivel mundial, por su incomparable sabor, textura y variedad de formas. Su uso data de hace miles de años y hoy en día se puede hallar casi cualquier parte del mundo por su gran adaptabilidad a los diferentes climas.
Se sabe que el limón aporta grandes beneficios para el organismo, a la vez que tiene propiedades únicas que posibilitan una mejor calidad de vida. Sin embargo, la ingesta de esta fruta está contraindicada en varios grupos de personas que es conveniente tener en cuenta y evitar colocarlo en tu receta.
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Es muy conocido que el limón provee grandes cantidades de vitamina C, antioxidantes, anticancerígenos y elementos que depuran. Es un poderoso fruto que se puede utilizar en áreas como la belleza, además de la medicina casera, donde es indispensable en preparaciones de todo tipo.
A pesar, de lo mencionado, la ingesta de este alimento natural no está indicado para cierto grupo de personas, por lo que podrían sufrir en su organismo ciertas complicaciones. En concreto, los menores de 4 años, las damas que estén cursando un embarazo y las personas que hayan sufrido alguna vez de úlceras de tipo gástrico no deberían comer este vegetal.
El grupo de personas descrito no debería comer limón en ninguna de sus formas, recetas, elaboraciones o preparaciones. Esto debido a algunos componentes ácidos como el ácido cítrico, ácido fórmico, ácido málico y otros que podrían comprometer la integridad del estómago.
Si bien el uso de esta fruta está recomendado en muchas áreas de la vida, es posible que su consumo pueda causar ciertas incomodidades en determinadas personas, por lo que conocer quiénes pueden degustar las delicias preparadas con este fruto es indispensable.
Para reducir de peso
Se dice comúnmente que el limón puede ayudar a reducir de peso si es administrado en preparaciones como infusiones de tipo té, especialmente con su cáscara. Desafortunadamente, no está probado científicamente que esto tenga asidero, ya que se sabe que la pérdida de peso se debe al llamado déficit calórico.
Sin embargo, es posible que las personas experimenten una ingesta moderada luego de beber el té de cáscara de limón, puesto que el agua de la infusión provee sensación de saciedad. Por lo pronto, aunque está probado que no ayuda a la reducción de peso, nunca está de más probar algo nuevo y delicioso.